No todos los alimentos indicados para combatir el frío, y los catarros, tienen que ser especialmente calóricos.
Hola a tod@s,
“el frío aprieta, el hambre también”, por ello dedicaré el post de hoy a los alimentos o comidas que nos ayudarán a combatir el frío, y de paso evitar algún que otro resfriado…
Durante esta época el cuerpo nos pide alimentos calientes y calóricos, por lo que si no prestamos atención, podemos engordar notablemente. Por suerte, no todos los alimentos indicados para combatir el frío, y los catarros, tienen que ser especialmente calóricos si se toman las precauciones necesarias.
Aquí van algunos consejos para pasar un invierno sin sobresaltos:
Añadir sopa a las comidas
Se trata del alimento por excelencia del invierno. Los caldos ayudan al organismo a mantener la temperatura corporal adecuada y además nos hidratan (en invierno bebemos mucha menos agua que en verano, pero también la necesitamos). La sopa de pollo, en concreto, tiene también propiedades anti-inflamatorias y ayuda a combatir las infecciones del tracto respiratorio.
Aumentar el aporte calórico sin exceder las grasas
Con el frío gastamos más calorías y por ello el aporte energético de los alimentos debe ser mayor. Por ello los guisos, los cocidos y las legumbres son platos tan típicos de los meses fríos. Hoy en día, no obstante, no es necesario ser tan radicales en cuanto a la grasa. Ni pasamos tanto frío (por suerte casi todos trabajamos con calefacción), ni realizamos una actividad física tan exigente como en los antiguos entornos rurales. Por ello, si no queremos ganar kilos sin medida durante el invierno, podemos reducir la grasa de nuestras comidas y apostar por el consumo de grasas saludables, como el famoso omega-3, que se encuentra sobre todo en el pescado azul. Además, a la hora de cocinar, podemos esforzarnos por retirar la grasa sobrante de nuestros guisos o apostar, directamente, por preparar estos sin añadir más de la que sea estrictamente necesaria. Aunque parezca mentira, las lentejas se pueden preparar sin chorizo.
La energía también puede obtenerse a través de los hidratos de carbono complejos ( cereales sin refinar, arroz, legumbres…)
Cocina con cebolla, ajo y jengibre
Estos tres vegetales refuerzan nuestro sistema inmunológico y se pueden añadir a prácticamente cualquier plato. El ajo contiene alicina, un compuesto con efectos antibióticos y antioxidantes, que puede ser un gran aliado contra los resfriados. La cebolla, además de ser una importante fuente de vitaminas, tiene propiedades anti-reumáticas, una enfermedad cuyos efectos se disparan en invierno. El jengibre, aunque no se usa demasiado en España, es quizás el mayor aliado contra el frío. Aunque tradicionalmente se ha usado sólo para la elaboración de dulces, puede añadirse a los asados, los guisos, o cualquier infusión o zumo. Tiene propiedades anti-inflamatorias y expectorantes, por lo que es recomendable su consumo frente a cualquier tipo de afección respiratoria, ya sea catarro, gripe o una simple inflamación de la garganta. No es casual que sea un alimento muy utilizado en todo el norte de Europa.
Hidratarse debidamente (mejor con infusiones)
Estar convenientemente hidratado es esencial, no sólo en verano. El agua puede ayudarnos, además, a aliviar la mucosidad, que suele ser un gran estorbo en estas fechas. Dado que el cuerpo nos pide beber menos agua, una buena forma de obligarnos a beber líquido es tomar una infusión después de cada comida, o entre horas. Los líquidos calientes ayudan a aliviar el dolor de garganta y la congestión nasal. El té además es rico en antioxidantes y puede ser útil para combatir las infecciones del tracto respiratorio. No obstante, todo tiene un límite.
Reducir el alcohol
Aunque el alcohol se ha visto siempre como un buen aliado contra el frío, es una sustancia que debilita el sistema inmune (que en invierno debe funcionar a pleno rendimiento), hace que nos resfriemos con mayor facilidad y, además, nos deshidrata. Es cierto que, en un primer momento, el alcohol parece calentarnos, pues tiene un efecto vasodilatador, pero es una quimera. Cuando tenemos frío disminuye la circulación de la sangre en las extremidades para que esta se concentre en los órganos vitales. Si el frío sigue en aumento los vasos se estrechan cada vez más. Se trata de un sistema de defensa que se contrarresta con el alcohol. Por eso cualquier montañero mínimamente experimentado sabe que el mito de que el alcohol puede ser útil para combatir la congelación no solo es falso, es además peligroso.
A la rica fruta
Aunque la fruta debe consumirse durante todo el año, los expertos recomiendan aumentar su ingesta en invierno. La vitamina C presente en los cítricos, las frutas por excelencia de estas fechas, ayuda a prevenir los resfriados y reducir sus síntomas. Aunque las naranjas y mandarinas son las frutas que más tomamos en invierno, no debemos olvidarnos del kiwi, que también tiene muchísima vitamina C. Un buen hábito a instaurar en invierno es el de tomar un zumo de naranja todas las mañanas. No hay nada mejor para aguantar un duro y frío día de trabajo.
Muévete
El ejercicio físicoes otra forma de conseguir una mayor actividad interna y lograr aumentar la temperatura media del organismo. Si nos mantenemos inactivos nuestros órganos, y sobre todo la circulación, se mantienen en reposo, lo que hace que la sangre fluya mucho más lenta, y por lo tanto, la temperatura sea menor. Si nos mantenemos activos aumentaremos el ritmo cardíaco con el consiguiente aumento de la circulación y de la temperatura corporal, plantándole cara al mal tiempo.
Así que ante el frío que se nos acerca: “Pongámonos los alimentos por abrigos y bufandas, una sonrisa en la actitud diaria, actividad física como lumbre y ropa calentita”.
Desde “bailar no es solo moverse” quiero acercar la danza como modo de vida saludable y daros una alternativa aquellos que os aburre el “hacer deporte”.
Las cookies ayudan a personalizar la web a tu gusto y mejorar nuestro servicio.
Funcional Siempre activo
El almacenamiento o acceso técnico es estrictamente necesario para el propósito legítimo de permitir el uso de un servicio específico explícitamente solicitado por el abonado o usuario, o con el único propósito de llevar a cabo la transmisión de una comunicación a través de una red de comunicaciones electrónicas.
Preferencias
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para la finalidad legítima de almacenar preferencias no solicitadas por el abonado o usuario.
Estadísticas
El almacenamiento o acceso técnico que es utilizado exclusivamente con fines estadísticos.El almacenamiento o acceso técnico que se utiliza exclusivamente con fines estadísticos anónimos. Sin un requerimiento, el cumplimiento voluntario por parte de tu Proveedor de servicios de Internet, o los registros adicionales de un tercero, la información almacenada o recuperada sólo para este propósito no se puede utilizar para identificarte.
Marketing
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para crear perfiles de usuario para enviar publicidad, o para rastrear al usuario en una web o en varias web con fines de marketing similares.